ABRIENDO CONSCIENCIA Y TRANSFORMANDO VIDAS POR DOLOR Y DUELO DE HUMANIDAD Es una manera humana e inversa, de apertura de consciencia con dolor y duelo de humanidad para abrirse la consciencia y hacer la transformación en si mismo. La manera humano divina y reinvertida es transformando para abrir la consciencia sin el dolor y duelo de humanidad.

Si usted da click al link en el título, va a encontrarse con una historia entre miles, que resalta el cambio o rediseño en la vida de los seres humanos que han enfrentado esta pandemia del covid-19, y se han encontrado con lo más maravilloso: El encuentro consigo mismo en la experiencia subjetiva con su Dios interior.

Emerge el ángel de luz en medio de las tinieblas. Brilla la luz en medio de la oscuridad. Se levanta el ave fénix en medio de sus propias cenizas. Es lo que esta sucediendo en medio de esta pandemia de covid 19 mundial. La humanidad esta sufriendo lo indecible pero solo quienes lo viven se están dando cuenta. Hay una gran parte de la humanidad que no se esta enterando, porque solo ve o no ve las noticias por los medios de comunicación que solo toca la superficie del problema. Esa parte de humanidad, tiene que ir al fondo, al interno de si mismo, no para vivir el dolor o duelo de humanidad, sino para enterarse que el mundo esta cambiando, la humanidad ya no será la misma, pero no la humanidad ajena solamente, la humanidad propia que esta en cada ser humano. Si cada ser humano no cambia, no se transforma, no se rediseña desde su corazón, descubriendo o reconectando la verdad en si mismo, no podrá descubrir a Dios, es decir su propia divinidad. Si no se transforma, tendrá en otro momento que vivir su propio dolor y duelo propio, pues no fue suficiente el dolor ajeno como espejo de si mismo para el cambio y tiene que vivir su propia experiencia.

No voy a ponerle nombres o rostros a esta reflexión, aunque si los tiene porque son situaciones reales, dos entre miles de casos semejantes. Pero con dos estamos haciendo honor a todos los demás que sin rostro, solo espero que usted que lee estas líneas, le ponga su propio rostro o el rostro de su ser mas querido, para bucear profundo en sí mismo y encontrarse con su realidad, la suya, no la ajena, pues es la única manera de valorar a través de los demás lo que se tiene o se reconoce como propio. Usted con usted mismo. Es la manera mas corta o directa del reencuentro consigo mismo. La otra manera es verse en el espejo del otro, pero esto poca vez se da, ya que vemos lo externo como lo que no es nuestro o nosotros mismos, y vemos todo como que "a mi no me va a pasar", pues se corre la película de los demás que no se observa como propia. Esto es sano para ver trasfondos de vida como enseñanzas, pero no para el encuentro de sí mismo.

Entonces, estoy haciendo el trabajo de ir al fondo de una consciencia, la mía. Pero si toco su propia consciencia ya estoy iluminando como el faro, que guía a quien así lo necesita. ¿Como puede imaginarse alguien que gracias a Dios está en casa sin problemas de salud relacionado a este virus, y que solo se entera por las noticias cómo va el mundo y como cada ser humano se enfrenta a esta pandemia...imaginarse cuál es la situación real de los pacientes en los hospitales o clínicas que se enfrentan a una realidad cruda luchando entre la vida y la muerte? No hay como imaginarse...o si lo hace no está ni cerca a la realidad que vive la humanidad. Pero ni siquiera se puede llegar a imaginar cual es la transformación que está viviendo esa misma humanidad, el planeta, el ser humano, a pesar del dolor, la desolación y la muerte.

El testimonio que relata el paciente latino que se recuperó, según la entrevista que usted puede ver entrando por el link, es solo una muestra que Dios está dando la oportunidad de renacer en espíritu y verdad, a quienes han estado buscando su o la divinidad, para que abran sus consciencias y sean ayudadores y testimoniadores de una verdad que siempre ha estado allí: Dios nunca se ha apartado del ser humano. Es el mismo ser humano que se ha apartado de Dios, de si mismo, de su luz interior en su propio espíritu como chispa divina que le constituye como hijo de Dios. Dios siempre ha tenido un plan para cada ser humano, y lo mejor es que el mismo humano lo sabía cuándo encarno en esta tierra, pero lo olvido. Siempre hay una oportunidad de recordarlo, pero a veces, lamentablemente es con dolor, pero no debiera ser así. Quiero aquí relatarles de una manera sintética, después de creer que conocía el dolor de humanidad que ha trascendido al duelo de humanidad, pero que conocí más cercano con un ser querido aun no sea consanguíneo pero igual, cuando se trata de un ser humano que está padeciendo este flagelo igual que tantos en el mundo, pero que deja claro que ahora es cuando todos necesitamos hacer cambios en nuestra vida, de transformación y rediseño de corazón, hacia una mirada que retome el reencuentro con Dios, sin importar que no esté tocado por este flagelo mundial. Este como el anterior relato, toco mi propio ser, muy profundo. No mi alma, ni mi sentimiento, ni mi mente en mis pensamientos, toco mi interno como consciencia. Si toca mi alma, me habría padecido y en quebranto o desmadejado habría dejado registros psíquicos en mi ser. Si toca me sentimiento habría llorado y lamentado frente al emisor que fuerte y confiado me narraba su real estado. Si toca mi mente en mis pensamientos, mi ego se estaría imaginando con mi conocimiento mental, como hacer un material de negocio o rentable que pudiera tocar el alma de los demás y así mismo tocado sus bolsillos. Pero lo tome con mi consciencia. Profundice en mi mismo, sin pensamiento, sin sentimiento o emoción, sin alma de quebrantos, y así entre en la intimidad del otro, respetando su estado por la misma confianza y unidad que deposito en mí. Hacía tiempo que no sabia de esta mi amiga, mi hermana, después que, aunque no teníamos una comunicación continua, por lo distante de vivienda y por la ocupación de cada uno, si teníamos conexión constante por un chat o alguna que otra llamada. Pero, de momento, un paréntesis, un silencio, que me llevo a la preocupación. Pregunte por todo lado y había un mutismo total. Nadie daba respuestas a pesar de hablar y chatear con las personas allegadas a ella Pero siempre espere confiando en su comunicación. Pasaron como tres meses. y siempre todo lo que se busca en amor se encuentra en ese mismo amor. Un día entro su llamada. Rápidamente conteste. Escuche su voz, pero no parecía su voz. Era un tono débil, cansado que se perdía y no podía sostenerse en la comunicación. Mi pregunta: Como estas? Donde estas? Estas bien? y otras que se agolparon en salir de mi boca buscando afanosamente de entrar a su realidad. Me dijo: "Luego te cuento. Solo te llamo para pedirte un favor". Y respeté su instante y rápidamente hice lo que necesitaba y quedamos de comunicarnos luego. No fue pronto su nueva llamada. Paso un día donde le envié chat de fortaleza y confianza aun sin saber que estaba pasando. Solo sabia que meses antes había tenido una cirugía de cáncer, pero su ánimo, alegría y fortaleza lo supero y estaba en el proceso de algunos implantes reconstructivos, pero con superación en su recuperación. Solo hasta ahí sabia Pensé que de momento habría recaído por estos procedimientos médicos. Pero no fue así. Una brizna de inquietud cruzo por mi mente sobre el contagio por el coronavirus, aquietando mis pensamientos, aleje esta duda. Pero si era lo inesperado. Le llame al día siguiente, y después de varios intentos de comunicación, contesto a mi llamada. Y con la fortaleza de su ser, pero en un estado claudicante de salud, con su voz sostenida, aunque débil, me relato, comenzando con: "Amigo, esta es la peor situación que estoy viviendo". Sintetizando el relato, es una persona paciente sobre viviente de cáncer, de unos 62 años, a quien solo el pasado 4 de abril tuvo el procedimiento de cirugía plástica para los implantes. Cuatro días después, sintió debilidad y desmayo y fue internada en una clínica donde entro en estado de coma a lo largo un mes y medio, a lo largo de lo cual los médicos hicieron prueba del coronavirus, dando positivo a la muestra. En este estado de coma, favorablemente no se le infecto las heridas del procedimiento de implante, permaneciendo por este periodo ayudada con el respirador que le mantuvo viva. Cerca de mes y medio en coma. Hace 2 semanas de la fecha de este artículo, ella despertó muy suavemente, sin habla y sin poder tomar alimento alguno. Los médicos determinaron que se debía realizar una traqueotomía para poder darle vitalidad por respiración. Cuando la llevaban al quirófano, ella despertó totalmente con un grito fuerte, tomando por primera vez una consciencia de su estado, y respirando con mayor facilidad por si misma, sin respirador, viendo los médicos que ya no era necesario la traqueotomía y la volvieron a la habitación de hospitalización. Pregunto a su esposo que la acompañaba camino al quirófano, que le había sucedido y porque ella estaba en una clínica. Vio a su esposo llorando y le pregunto por qué estaba así, ya que ella no veía nada grave-En este instante ella no sabía que estaba infectada por el covid-19-Queria con desespero respuestas a sus preguntas. El esposo le contesto que lloraba de alegría. Ella cuestiono que si era de alegría por qué estaba llorando de esa manera. Él le contesto que la alegría es porque ella ya había pasado el puente tan difícil. Ella solo recordaba los puentes de la ciudad de NY donde se encontraba. Pero cual puente” Pregunto. Allí, solo en ese momento ella pudo conocer de su verdadero estado de manos de sus médicos y de su esposo. Luego se dio cuenta que el virus no solo la había dejado en estado de coma, sino que también le paralizo todo el cuerpo; es decir ella no tenía movimiento alguno Paralizada, comenzó a sentir fuertes dolores en su cuerpo y ahí comenzó a darse cuenta de los pormenores de su recuperación y los cuidados que estaba recibiendo por parte del personal médico para su recuperación. Se dio cuenta por cada terapia, para lo cual era llevada a maquinas que ayudaban para lograr movilidad a sus músculos, lo cual producía en ella fuertes dolores por su estado de gravedad; así como el aceptar que debía ser atendida desde lo más mínimo en su misma cama hasta el aseo personal todos los días, lo cual, por ser una persona que siempre fue activa, independiente no fue fácil aceptar que en lo más íntimo tuviera la ayuda del personal de la clínica que como ángeles ayudadores lo hacían con todo el amor del mundo. Recién tomando la consciencia de su estado, le embargo la tristeza, amargura, soledad y depresión fuerte, lo que le hizo pensar que sería mejor morir que soportar ese estado de sufrimiento. así estuvo por una semana, en la cual no acepto comida alguna y solo llorar día y noche era su consuelo. Durante esa semana, sola en su cuarto, ya que solo el personal médico podía estar con ella, alejada de sus seres queridos, en la noche en su cuarto, comenzó a ver un rostro en medio de la noche que todos los días se le aparecía, pero ella no podía identificar a pesar que le era claro en sus facciones. Al pasar los días en esa semana, ella ya le hablo y preguntando quien era, cerraba sus ojos para quitar ese rostro, pero continuaba viéndolo. El rostro bien identificado, pero no reconocido por ella, solo la miraba con profundo amor, sin expresar una palabra. Ella pudo identificar que con el rostro había un corazón muy real, que como ella lo expresa, nunca había visto en su vida un corazón. Fue tan fuerte la profunda mirada desde ese rostro hacía ella, que, sin temor alguno, le decía que por favor se fuera y la dejara dormir. Pasados los días en esa semana en que se le aparecía en la noche el mismo rostro, que ella comenzó a identificar que parecía conocerlo y le dijo: “Yo creo saber quién es usted, ¡¡¡pero aún no me es fácil del todo…Pero creo saber quién es usted!!! Así el rostro y su corazón de amor, al finalizar la semana no volvió a aparecer. Ella solicito si podía tener un teléfono y por primera vez pudo comunicarse con su familia desde aquel día en que cayó en coma. Hablo y conto y describió la aparición del rostro a una hermana y esta le dijo que según los detalles era el rostro del sagrado corazón de Jesús. Solo en ese momento ella recordó muy vagamente un cuadro del sagrado corazón de Jesús que tenía su mama en su cuarto muchos años atrás. Su hermana le mando una foto por whatsapp del cuadro del sagrado corazón de Jesús, y allí pudo ver que era el mismo rostro pero que el que le miraba tenía una mirada llena de amor muy profunda, serio, pero con un corazón muy real de amor. Aunque cree en Dios, pero sin ser de religión alguna, por primera vez identificaba a Dios a través de un rostro, ya que ella no ha sido ni de imágenes, ni religiones, ni de santos, ni de biblias, pues ni sabe de qué color son. Lo único que ella conoce es de ayudar, servir a los demás, identificarse con el necesitado sin preguntar primero por qué sus lágrimas. Ella ha sido de un corazón limpio y claro, sin importar ni preguntar por qué ni a quien. Ella me pregunto: "Dime, en verdad hay gente que no cree en Dios" Si es así, por eso es estos males y estas pandemias. Hay que abrir los corazones a Dios. Tan igual a como lo expreso Jesús-Cristo no quiero sacrificios, quiero corazones limpios. Solo los de corazón puro, inocentes como niños entraran al reino de los cielos. Allí se lamentó de no poder haberle pedido a Dios en el rostro del sagrado corazón de Jesús, todo lo que ella necesitaba de ayuda por el sufrimiento causado por este “maldito virus” tal como llamo al coronavirus, y se quejó de lo irresponsable que habían sido los representantes del gobierno de no haber prestado atención a tiempo, ni siquiera el mínimo interés al inicio, cuando ya se anunciaba de la existencia de la enfermedad en otros países, y colocaba un ejemplo de la negligencia por incredulidad que no fuera algo letal. Igual a cuando en casa se tiene a un enfermo en peligro de muerte y nadie hacer nada, ni siquiera llevarlo al médico y dejarlo morir sin hacer nada. Es demasiada irresponsabilidad que ella ve de cómo se manejó todo esto desde el principio. Y lo dice ella que es laboratorista clínica y muchos años trabajando en instituciones hospitalarias de salud Pudo darse cuenta, que siendo una persona que no estaba acostumbrada a comidas sencillas o insípidas, tuvo que aceptar recibir la comida de hospital, la cual conocemos la mayoría de las personas que hemos estado en estas instituciones. Pero que, en sus palabras, a pesar de este tipo de comida sin sabor, le parecía lo mejor en exquisitez agradecía lo más mínimo que pudieran darle cada día. Ahora había aprendido que no solo en la vida el amor es dar, sino que el amor es también aprender y aceptar recibir, retomando la sencillez y humildad en la vida Aprendió a valorar cada servicio y el agua que le daban, dándose cuenta que esos valores habían cambiado después de estar en coma y en su estado de postración. Al final me dijo que en la clínica donde estaba hospitalizada, solo había un árbol en todo el terreno, y este precisamente estaba frente a su ventana. Aun ella que ama tanto la naturaleza, podía apreciar el verdor y la belleza nunca vista en el árbol que tenía frente a ella. Decía que nunca había apreciado que el verde de sus hojas era tan vivo…que ahora si podía ver el verde del árbol muy diferente a como lo conocía. Después de todo esto, me dijo que ella solo espera salir de allí, para ayudar a todo aquel que necesita, ya que ni el dinero ni las cosas materiales son lo más importante, ya que son solo eso…materiales…y que ella sentía que el amor y el reconocer a Dios en el corazón de cada persona es lo que necesita el ser humano y eso es lo que ella va a entregar, incluyendo luego también lo material que sabe también necesita la gente. Pero que primero esta Dios, y que esto es lo que hará que pueda evitarse otra dolor o pandemia, evitando así un nuevo sufrimiento, dolor y duelo de humanidad. Fue un dialogo de aprox. 2 horas. Le pude expresar desde mi corazón y mi consciencia lo que era ella en su interno, buscando en un instante donde se aflora y se dispone la consciencia a abrirse, que ella pudiera reconocerse en su realidad. Buscando conectar su espíritu, que en medio del dolor se libera para transmitir en libertad la sabiduría a sus cuerpos que le constituyen. Le relate el primer episodio que ustedes han visto y escuchado en el video del link. Me dijo que buscaría con el personal medico que le trajeran una biblia, y me pidió que le leyera el salmo 30. Rápidamente traje mi biblia que mantengo abierta en el salmo 91 y leí este y el salmo 30. Me pidió que les tomara fotos a estos salmos y se los enviara por un chat. Así lo hice. Se que ahora tiene el alimento para su espíritu que reconfortara todo su ser, sumado a que ya está tomando también alimento para su cuerpo para su mejor bienestar físico. Después de todo esto, al terminar la llamada y enviar chats pedidos, mi mente igual que ella que se lamentaba no haber aprovechado la oportunidad de haber hecho sus peticiones al sagrado corazón de Jesús, también yo lamentaba no haber grabado todo este testimonio. Pero igual que le dije a ella que no era el momento de las peticiones, pues era el momento del encuentro, el respeto, la intimidad y conexión del espíritu de Dios con ella transmitiéndole lo que abriría su consciencia, tal como se hizo; también así no era el momento de razones o lógicas mentales de grabaciones para logros futuros, pues debió de haber sido como fue, para entrar en comunión con su consciencia que se abrió en conexión con mi consciencia, intimidad que no puede ser violada, tan igual al secreto de la confesión o al juramento hipocrático del médico, donde solo así se hace honor a quien honor tiene, dando gracias a Dios y alabando su nombre a quien la grandeza y la alabanza le pertenece. Ella continúa superando aun esta batalla, pero ya pudo ver la luz al otro lado del túnel, y yo estoy seguro que su rediseño de vida, ha hecho que sea elegida por Dios, tan igual a muchos seres que están o han superado esta batalla, incluyendo aun a los que partieron en espíritu, para cumplir un nuevo plan de Dios sobre esta tierra o por fuera de ella. Es el momento de introspección, donde cada uno con la consciencia y luz de su espíritu, debe elevar su ser al creador Dios, para extender la mejor intención de paz, amor y luz hacia toda la humanidad, no para que se termino el dolor por el dolor, no, porque esto es una consecuencia de lo primero que debe hacerse abrir la consciencia. Nuestra acción entonces es para que toda la humanidad abra sus consciencias, cada ser humano, para evitar otra pandemia o destrucción natural y evitar así más dolor y sufrimiento.

Así hemos aprendido que hay que transformar nuestro ser ante el espejo de Dios, imagen y semejanza para que abramos nuestra propia consciencia de humanidad, sin dolor, sin destrucción, sin sufrimiento, dando un salto quántico para que no sea a través del quebranto y padecimiento que abramos la consciencia. Dios siempre ha estado ahí, en el corazón de cada ser humano. Nos hemos vuelto ciegos y sordos a pesar de haber escuchado las palabras sabias el que tenga oídos que oiga y el que tenga ojos que vea.

P.D. Dos días después de terminar este artículo, hable de nuevo con ella, mi amiga, y me dijo: "Amigo. Estoy agradecida con Dios y sé que no me abandona. Ayer todavía en iguales condiciones, fui ayudada por las enfermeras a mover mi cuerpo y tener el aseo diario. Todavía estaba limitada para mis funciones personales. Dios hoy, ¡Me puso de pie!! ¡¡Hoy pude levantarme!! Una fuerza mayor a la mía me dio fuerzas, después de decirme a mí misma.! ¡Puedo hacerlo! Todas las enfermeras y personal presente, aplaudieron y agradecían este momento. Uno de ellos sorprendido me dijo que, ¡Siendo yo un paciente con cáncer me había recuperado de esta manera! Doy gracias a Dios...Voy a hablar con mi esposo y a darle la sorpresa. Voy a decirle que le tengo un regalo de Dios también para él…y le cuento. (Pero yo antes, de alegría, ya le había compartido a su esposo en una llamada minutos antes, de este real instante eterno de amor de Dios por sus hijos que llenos de confianza permanecen abriendo sus consciencias) Así con esta alegría, ella continuaba renovando todo su ser integral, aceptando a Dios primero en su vida. Bendiciones